30/07/2018

Sentirnos bien en nuestra propia piel

Dra. Tania Monzón, Nefróloga de Avericum.

La piel es el órgano más extenso del organismo, por lo tanto, debemos prestarle la importancia que se merece.

Entre sus funciones se encuentra el servir de barrera para proteger nuestro organismo, controlar la temperatura y, también, a través de sus terminaciones nerviosas el sentido del tacto. Durante todo el año, pero más aún en la época estival, la piel sufre con los cambios de humedad y temperatura. Además, los pacientes con enfermedad renal por sus características especiales son mas susceptibles a lesiones y problemas en la piel. Cuando nuestra piel está dañada o irritada puede resultar tremendamente desagradable, incómodo o incluso doloroso para nuestros pacientes. De hecho, coloquialmente una expresión de bienestar es 'sentirnos bien en nuestra propia piel'.

Un gran número de pacientes con enfermedad renal, así como pacientes que reciben tratamiento con hemodiálisis, desarrollan problemas cutáneos. El más frecuente y que les reporta más molestias es la presencia de picor. El picor o prurito urémico tiene un origen multi factorial y entre sus posibles causas se encuentra la alteración del equilibrio entre el calcio y el fósforo, así como las hormonas que lo regulan, el uso de determinados fármacos, la retención de toxinas, el déficit de hierro o la inflamación generalizada. Otras causas serían las reacciones alérgicas de la piel a los diferentes componentes de la diálisis mediante la secreción de histaminas.

¿Cómo podemos cuidar y mantener nuestra piel?

  • Limpieza diaria utilizando jabones neutros no agresivos.

  • Hidratar la piel con uso de cremas hidratantes emulgentes.

  • Son preferibles las duchas a los baños de agua caliente. Si aún así prefiere los baños, añada bicarbonato sódico o avena al agua de baño para intentar aliviar el picor.

  • Use ropa de algodón o de tejidos naturales. Y utilice para su lavado detergentes suaves y sin perfume para evitar reacciones alérgicas.

  • Intente no rascarse, ya que suele empeorar los picores y puede provocarle heridas en la piel con riesgo de infección. Trate de tener las uñas cortas para evitar rascarse.

  • Asegúrese de que está tomando adecuadamente su dosis correcta de quelantes del fósforo.