09/10/2024

Hacer visible, lo invisible: la salud mental y el paciente renal

Avericum

En el Día Mundial de la Salud Mental (10 de octubre) es fundamental reconocer no solo el impacto del estrés cotidiano, la ansiedad y la depresión, sino también la realidad de quienes se enfrentan a la vida dependiendo de un tratamiento constante. Para los pacientes con insuficiencia renal crónica que dependen de la hemodiálisis, la salud mental se convierte en un aspecto crucial de su lucha diaria por la vida, a menudo subestimado en el discurso sobre su bienestar.
Hacer visible, lo invisible: la salud mental y el paciente renal

La hemodiálisis no es solo un tratamiento, es una rutina implacable que define el ritmo de vida de quienes dependen de ella. Las sesiones, que pueden durar hasta cuatro horas y se repiten tres veces a la semana, no solo drenan energía física, sino que también afectan profundamente el bienestar emocional.
La incertidumbre sobre el futuro, la sensación de dependencia de una máquina para sobrevivir, y los cambios drásticos en el estilo de vida pueden provocar ansiedad, depresión y un sentimiento abrumador de aislamiento.

Retos mentales que pocos ven

La mente y el cuerpo están profundamente conectados. Un paciente de hemodiálisis con una buena salud mental puede enfrentar los desafíos del tratamiento de manera más positiva y, en muchos casos, obtener mejores resultados médicos. La falta de apoyo emocional, en cambio, puede hacer que una condición ya complicada se vuelva complicada.

Diversos estudios han demostrado que entre un 40% y un 50% de los pacientes en hemodiálisis experimentan trastornos psicológicos, especialmente depresión. Este impacto emocional puede afectar la eficacia del tratamiento aumentando el riesgo de complicaciones y reduciendo la adherencia al mismo.

Cuidar la salud mental no es un lujo, es una necesidad vital.

El poder del apoyo

Para mejorar la vida de los pacientes con insuficiencia renal, en Avericum adoptamos un enfoque holístico: no basta con atender únicamente sus cuerpos, sino que también debemos cuidar de sus mentes. Durante el tratamiento incluimos apoyo psicológico como parte de la atención habitual, ofreciendo herramientas como terapia cognitiva, terapia ocupacional y, sobre todo, un espacio donde los pacientes puedan compartir sus emociones.

El apoyo familiar y social también juega un papel crucial. Los grupos de apoyo que ofrece Avericum, a través de la Escuela de Pacientes o las diferentes Asociaciones de ALCER brindan un lugar donde aquellos en tratamiento pueden expresar su frustración, miedos y esperanzas, y sentirse verdaderamente comprendidos.

En este Día Mundial de la Salud Mental, es fundamental abrir los ojos ante la realidad de los pacientes crónicos. No podemos seguir viendo la hemodiálisis solo como un tratamiento médico. Es una experiencia que afecta cada aspecto de la vida de las personas.

Es vital promover una visión más integral de la salud, donde el bienestar emocional sea tratado con la misma prioridad que la función renal.

Al cuidar la salud mental de los pacientes en hemodiálisis, les damos más que una vida prolongada: les damos la oportunidad de vivir con dignidad y bienestar. Cuidar la mente también es cuidar la vida. ¡Hagamos de esto una prioridad!

Departamento de Psicología, Avericum.